Partido chivo, trabado, con fricciones, algo de ojete. Anécdotas, nada más. Lo importante es que Gladiadores empató 0 a 0 con Kesello y se metió en la promoción. Ahora, quedó nuevamente bien cerca de pegar el salto de categoría. El próximo rival: nada menos que el clásico, Pmascal, que viene de una pésima campaña. Y a diferencia del partido del año pasado, esta vez no hay ventaja deportiva. El que gana, a la B. El que pierde, a la C.
El encuentro del sábado fue más duro de lo esperado. El partido ante el mismo rival jugado 15 días antes por la fase regular nada tuvo que ver con este. En Kesello se sumaron tres jugadores que le dieron más fútbol a los merengues pero que no le restaron al equipo su componente más profundo: la patada, la protesta y –hay que admitirlo- la guapeza.
Gladiadores no jugó bien. Fue uno de los partidos con menos llegadas a favor en todo el torneo. En el ping pong, dijo Fabbri, no aparecen ataques del Celeste. En cambio, sí hubieron polémicas, todas ellas bien resueltas por el juez principal: dos penales correctamente no sancionados.
Los del Moya aguantaron bien metidos atrás. No porque haya sido el propósito, sino porque las circunstancias del partido así lo quisieron. Aunque un nuevo plateísta aseguró con voz crítica que los cambios fueron defensivos. “Sacar un delantero y poner un tercer marcador central recuerda a las mejores prácticas de grandes conjuntos de la historia del fútbol como Ferro del 89, Estudiantes del 92 o, me animo a decir, Defensores de Cambaceres 2005”, comentó este ex 8,4,5,2,6 y hasta 1 de Gladiadores cuya identidad preferimos reservar.
Si hay una jugada para destacar, la que realmente logró que los huevos traspasaran los límites de la garganta, se dio en el segundo tiempo, cuando luego de un centro, el remate del hombre de Kesello se estrelló en el travesaño y en el mismo rebote una volea pasó muy cerca del paso.
Cuando se moría el partido, los rivales no quisieron aceptar la gallarda propuesta de Gladiadores en pos del buen juego de disputar los últimos minutos en otra cancha. La iniciativa fue pensada porque en el terreno en el que se llevó a cabo el match “el viento se arremolina y en la cancha 4 no”, como expuso con claridad de catedrático Alejandro Bellorini a los delanteros merengues. Por supuesto, el partido terminó con disturbios.
Formación: Gustavo; Topo, Fede, Ariel, Maxi; Sebastián, Emiliano, Alejandro; Germán, Nicolás, Villar. DT: Moya
Cambios: ST: Rodrigo por Villar, Ramiro por Maxi, Picu por Nicolás.

Apostillas:
- Gladiadores avanzó por primera vez en su historia a una promoción para ascender de categoría.
- En declaraciones posteriores al encuentro, varios jugadores admitieron que uno de los rituales que practican si Gladiadores al menos empata es enfiestarse con una pariente muy pero muy cercana de un reconocido hincha del club. “Es por cábala”, dijeron.
No hay comentarios:
Publicar un comentario